ACTIVIDAD MÓDULO 1
La conducta discriminatoria que yo quisiera abordar en esta actividad es la relacionada con las actividades deportivas que se ofrecen a las niñas y a los niños en el ámbito escolar y municipal.
Aparentemente no se observa una situación de desigualdad entre niños y niñas a la hora de optar por la práctica de un deporte ya que pueden escoger el que en un principio les guste. Esa es la teoría. La práctica, es totalmente distinta. Yo como padre de dos hijas entre 6 y 8 años, me encuentro con la situación de que la oferta de actividades deportivas para las niñas es mucho menor que para los niños. Esto es debido a las costumbres sociales arraigadas en la sociedad a todos los niveles. Es decir, si mis hijas, por ejemplo les gusta el fútbol, el problema que me encuentro es que no hay clubes con sección femenina para eso márgenes de edad, sin embargo si hay para los niños en todas las categorías de edades desde los más pequeños hasta adultos. Sólo te dan la posibilidad de que entrenen con un equipo de niños hasta determinada edad en la cual ya dispongan del equipo en su sección femenina. De optar por esto, por meterlas en un equipo de niños, les crearía una situación en la que no se encontrarían cómodas ya que se sentirían fuera de lugar porque el equipo está totalmente integrado por niños, entrenadores hombres, etc. Esto sucede en la mayoría de deportes de base. Entiendo que esto es una clara discriminación indirecta hacia el género femenino agravado por que las víctimas de esta situación de desigualdad son menores y ya en su subconsciente se interioriza que la sociedad trata de distinta forma a niñas y niños. En el momento que un club decide tener sección femenina y masculina debería ser obligatorio que en todas las categorías de edades haya equipo de ambas secciones, no sólo de la masculina.
Esto sucede con la mayoría de deportes que tradicionalmente son practicados por hombres. Dejando para las niñas los que la sociedad les transmite injustamente que son más aptos para ellas, es decir, gimnasia rítmica, patinaje, baile, etc.
Esta situación, a pesar de que no viene dada por la imposición de ninguna normativa, lo cual sería ilegal si pasase, entiendo que genera desigualdad y discriminación hacia las niñas. Indirectamente, si se está discriminando por la presión social que hace que no se pueda elegir con total libertad el deporte a practicar. Desde los poderes públicos se debería invertir en medios materiales y humanos y además promover la participación de las niñas en todos y cada uno de los deportes, para que las siguientes generaciones no den por hecho que determinadas actividades deportivas son exclusivamente para niños.
También se debería invertir en educación para los adultos, es decir los padres y madres, los monitores y entrenadores y la sociedad en general para que se corrija en la medida de lo posible estas actitudes. Es cierto, que esto último es casi imposible ya que mentes adultas formadas y con sus ideas gravadas a fuego es muy complicado cambiarles su mentalidad, pero al menos que vean que determinadas conductas discriminatorias tendrán sus consecuencias y para esto último también es necesario legislar y lo que es más importante, buscar la forma de que toda esta información llegue a la gente, lo cual debe hacerse a través de todos los medios de difusión posibles. Posibilitando, de esta forma, que ya que los adultos muchos están ya perdidos, al menos las nuevas generaciones, en su mayoría, crezcan con otra mentalidad.
Comentarios
Publicar un comentario