MÓDULO 4 - OPCIÓN #1

Desde mi posición de empleado público lo que puedo hacer para impulsar la igualdad de trato y la no discriminación es por un lado aplicar escrupulosamente la normativa vigente en esta materia y no solo aplicarla si no facilitar que mis compañeras y compañeros que la desconozcan o no hayan profundizado en en ella, lo hagan.

Esto puedo hacerlo mostrándoles dónde y cómo pueden formarse en esta materia, así como predicando con el ejemplo, es decir, mostrando como se debe actuar y qué lenguaje usar en determinadas situaciones diarias de nuestro trabajo. 

En muchos casos, no se actúa del todo correctamente ante algunas de las personas a las que atendemos, pero no es porque se tengan ciertas convicciones personales discriminatorias, si no por desconocimiento del lenguaje adecuado a utilizar e incluso por costumbres sociales adquiridas desde pequeños que damos por sentado que son adecuadas y no es así. Entonces, desde mi posición, podría invitar a mis compañeras y compañeros, que todavía no haya recibido la formación necesaria, a que puedan ir modificando algunas cosas en esta línea.

En cuanto a las administradas y administrados a los que atendemos diariamente, puedo en primer lugar atenderles de forma correcta y en segundo lugar hacerles conocedores de todos sus derechos en esta materia así como sus medios y formas de ejercitarlos y lugares y personas a los que dirigirse en caso de sufrir algún tipo de discriminación para ejercitar su derecho a queja, reclamación o incluso denuncia. Estoy convencido de qué en muchos casos, ciertos colectivos como pueden ser personas extranjeras originarias de países en vías de desarrollo, desconocen los derechos que tienen en esta materia y la obligación que tienen los servicios públicos de respetarlos, en definitiva, la obligación de cumplir la ley y normativa vigente.

Por otra parte, quisiera incidir una vez más, en la importancia de invertir en educación, especialmente en los colegios y desde las edades más tempranas. Las personas adultas con ideas y mentalidades ya formadas, en muchos casos es muy difícil modificar su forma de pensar, en cuanto a conductas discriminatorias. Si por ejemplo eres un adulto racista no vas a dejar de serlo porque alguien te explique que eso está mal, pero tal vez tu hija o tu hijo a pesar del mal ejemplo en casa, si en el colegio desde el primer día se le educa en igualdad y no discriminación, cuando alcance la edad adulta puede que sea una persona respetuosa con el prójimo y tal vez incluso sea ella la que eduque a su padre en casa. La educación es fundamental. 

Un ejemplo de que la educación de los más jóvenes funciona es en materia de protección y concienciación medio ambiental. Todo el mundo estará de acuerdo conmigo en que hace treinta o cuarenta años, en la infancia de los que ahora somos madres y padres, lo más habitual era tirar todo al suelo. No había educación en respetar el medio ambiente ni mucho menos cultura del reciclaje aunque cierto es que ya se empezaba a atisbar el cambio. 

En esa época se empezó a educar en los colegios en respeto y conservación de la naturaleza. Llegábamos a casa y les explicábamos a nuestros padres y madres porque estaba mal tirar basura al suelo, en definitiva estábamos educando a nuestros padres y madres. 

Hoy día, estaréis de acuerdo conmigo, en que una amplia mayoría de personas en mayor o menor medida respetan el medio ambiente y están muy concienciadas de la importancia que tiene hacerlo. Una muestra clara y muy sencilla de entender que ejemplifica lo que se ha mejorado de una generación a la siguiente es que a nuestras hijas e hijos, que ya han crecido con este respeto al medio ambiente, ni se les pasa por la cabeza por ejemplo tirar el envoltorio del bocadillo al suelo en el parque después de merendar. 

Aunque evidentemente hay que reconocer que todavía hay una minoría de personas que diciéndolo finamente, están asilvestradas, se puede ver que el grueso de la población ha avanzado mucho en este sentido y seguimos avanzando aunque queda mucho por hacer.

Bien, pues en cuanto a la lucha contra la discriminación y por alcanzar la igualdad en todos los ámbitos de la sociedad, lo veo un poco igual, es decir, creo que es imprescindible que  invirtamos la mayor cantidad posible de medios en las nuevas generaciones para que cuando sean adultos la discriminación sólo quede en los libros de historia.